El 17 de junio de 2025 a hs.11.30 en el Dicasterio de las Causas de
los Santos, en Vaticano, se celebró la Apertura del Proceso Supletivo de
la Investigación diocesana de la Causa de Beatificación y Canonización
del Siervo de Dios TARCISIO RUBIN.
P. Tarcisio que nació en Italia en 1929, fue miembro de la Congregación
de los Misioneros de san Carlos, más conocida como Padres
Scalabrinianos.
Donó su vida por los más marginados siendo un misionero infatigable que
desarrolló su actividad evangelizadora en Suiza, Alemania, Italia y
Argentina, particularmente en Mendoza y en Jujuy. Es en Jujuy donde pone
todo su empeño en un modo original apostólico, con una opción radical de
vida religiosa.
El Santo Pueblo de Dios recuerda su accionar como un hombre de Dios que
dio toda su vida por los más pobres y desheredados, por los emigrantes
«golondrinas» chilenos y bolivianos que se encontraban lejos de su país,
de su familia, de sus afectos. Organizó misiones populares con aquellos
que se encontraban en trabajos temporarios y apoyando a los más
alejados, siguiendo las huellas de san Juan Bautista Scalabrini.
En sus momento de oración y contemplación intensa, rogaba a Dios de ser
fiel, hasta la muerte, de la vocación recibida, amando la Iglesia,
sirviendo al prójimo, sobre todo a los más pobres.
Ha sido presentada la investigación supletiva de su vida apostólica
para que luego del estudio por parte de la Santa Sede, si Dios así lo
quiere, puedan ser reconocidas sus virtudes.
El Canciller del Dicasterio, Cav. Federico Favero, realizó las acciones
correspondientes, controlando la documentación presentada con precisión.
La invocación religiosa la realizó Mons. Daniel Fernández, Obispo de
Jujuy, implorando al Espíritu Santo para que ilumine las mentes y
corazones de aquellos que tendrán que examinar esta documentación.
Estaban presentes el Cardenal Tomasi, el p. Leonir Chiarello, Superior
General, su Vicario General, el Postulador General y la Dirección
General de la Congregación Scalabriniana. El P. Marcelo Méndez, ofm,
Postulador de dicha Causa realizó una breve intervención resaltando la
figura del Siervo de Dios.
Con la oración mariana por excelencia se concluyó la celebración en el
Dicasterio.