La figura de Juan el Bautista domina la escena bíblica mostrándonos a este profeta, que fue el encargado de preparar al pueblo de Israel para recibir al Salvador del Mundo.
El profeta hoy LLAMA A LA CONVERSIÓN, predicando en el desierto a hombre de toda clase y condición, les advierte que el reino de Dios está por llegar que el Mesías esta haciéndose presente y que para que podamos recibirlo hace falta un cambio de vida, lo que llamamos conversión (metanoia).
Conversión es volvernos a Dios, VOLVER NUESTRO CORAZÓN A ÉL, descubrir lo mas importante de nuestra vida, descubrir los valores del reino de Dios y empezar a vivir fraternalmente como hermanos
Por eso LA CONVERSION es algo bien concreto, es algo que nos dice que tenemos que ser para Dios y ser para los demás, que nosotros NO SOMOS EL CENTRO DEL MUNDO y que tenemos que tener a todo el mundo a nuestra disposición.
¿Que hara falta preparar para que yo este más en paz con Dios, mas atento a él para que yo albergue en mi corazón también las necesidades de los demas?